Proyecto para habilitar a abogados como escribanos y la irrupción de la tecnología blockchain en la función notarial

En un contexto de profundas discusiones sobre la democratización del acceso a servicios legales y la modernización del ejercicio profesional, la diputada nacional Marcela Pagano ha presentado recientemente un proyecto de ley que podría modificar sustancialmente la función notarial en Argentina. Este proyecto habilita a los abogados matriculados para realizar funciones notariales, sin la exigencia de cursar una carrera específica de escribano o formar parte de colegios notariales cerrados.

Paralelamente, la tecnología blockchain emerge como una alternativa innovadora para la autenticación y validación de documentos, lo que plantea un posible cambio disruptivo en la tradicional función notarial.

El proyecto de ley y la apertura del ejercicio notarial

El proyecto de ley denominado “Libre ejercicio notarial” presentado por la diputada Marcela Pagano propone que toda persona con título de abogado/a expedido por universidades argentinas o revalidado conforme a las normativas vigentes quede habilitada para ejercer la función de escribano público. Esto implica que los abogados podrán autorizar instrumentos públicos cumpliendo los mismos estándares legales, técnicos y registrales que actualmente exigen para los escribanos tradicionales.

Uno de los aspectos centrales del proyecto es eliminar las restricciones que actualmente imponen colegios notariales cerrados que limitan el acceso a la función notarial a quienes poseen el título específico de escribano o que pertenecen a esos colegios. El artículo 3° del proyecto expresamente deja sin efecto estas disposiciones normativas, reglamentarias o estatutarias que restringen el ejercicio notarial exclusivamente a estos profesionales.

Este cambio habilitaría a los abogados a ejercer la fe pública sin necesidad de realizar cursos, exámenes adicionales o cumplir con cupos cerrados. Según sus promotores, esta medida busca ampliar la competencia y democratizar el acceso a servicios notariales, lo que podría traducirse en un aumento en la oferta y la reducción de costos para los usuarios.

Sin embargo, esta iniciativa ha generado controversia, especialmente en el Colegio de Escribanos, que considera que la medida puede poner en riesgo la seguridad jurídica. Para los opositores, la especialización y la regulación estricta de la función notarial son esenciales para garantizar la validez y autenticidad de los documentos públicos y proteger los derechos de las partes involucradas.

Implicancias jurídicas y sociales del proyecto

La función notarial ha sido tradicionalmente reservada para profesionales especializados debido a la responsabilidad que implica otorgar fe pública sobre actos jurídicos relevantes, como escrituras, contratos y poderes. Permitir que abogados sin formación específica en notariado asuman estas funciones podría tener un impacto directo en la

• seguridad jurídica, por la posible disminución en la calidad técnica y la supervisión profesional;
• acceso a la justicia, ya que se facilitaría a un mayor número de profesionales brindar estos servicios, potencialmente beneficiando a sectores con menor acceso;
• competencia en el mercado legal, con la posible reducción de costos y aumento de la oferta.

En la práctica, podría modificarse la dinámica tradicional de los servicios notariales, impactando en temas como la rapidez en la tramitación de documentos, la accesibilidad geográfica y económica para los ciudadanos, y la regulación de la responsabilidad profesional frente a eventuales errores u omisiones.

La tecnología blockchain: una alternativa disruptiva para la función notarial

Mientras se debate la desregulación del ejercicio notarial entre abogados y escribanos, la tecnología blockchain se perfila como una herramienta revolucionaria para la autenticación y certificación de documentos digitales. Blockchain es una base de datos distribuida y descentralizada que permite registrar transacciones de manera segura, inmutable y transparente.

En el ámbito legal, la blockchain puede garantizar la validez de documentos mediante la creación de certificados digitales, firmas electrónicas avanzadas y registros inalterables, reduciendo así la necesidad de intermediarios tradicionales como los notarios para autenticar ciertos actos y contratos.

Este sistema ofrece ventajas como:

• Mayor seguridad contra fraudes e intervenciones maliciosas, dado que la información registrada es inmutable y distribuida;
• Reducción de costos y tiempos en la gestión documental, al prescindir de estructuras físicas y múltiples verificaciones;
• Transparencia y trazabilidad total para las partes involucradas en una transacción.

Por estas razones, algunos expertos consideran que la tecnología blockchain podría plantear una transformación irreversible en la profesión notarial, desplazando o complementando funciones clásicas basadas en documentos físicos y procesos manuales.

Tensión entre innovación y tradición en el ámbito legal

El proyecto para habilitar a abogados a ejercer funciones notariales representa una apertura en el modelo tradicional, orientada a flexibilizar y democratizar el acceso a la función pública notarial. Sin embargo, la resistencia que genera en colegios profesionales refleja la preocupación por mantener criterios estrictos de seguridad jurídica y especialización.

Simultáneamente, la irrupción de la tecnología blockchain desafía la esencia misma del rol del escribano, pues propone reemplazar funciones de certificación y autenticación por mecanismos digitales seguros y automatizados.

Este escenario genera un debate profundo sobre cuál debe ser el futuro de la función notarial: si debe mantenerse una estructura regulada y monopolizada para proteger derechos o si es posible adoptar modelos más abiertos e innovadores que respondan a las nuevas tecnologías y demandas sociales.

En términos prácticos, para los usuarios esto puede traducirse en:

• Acceso más amplio y posiblemente más económico a servicios notariales si el proyecto se aprueba;
• Posibilidad de validación documental y certificación mediante plataformas digitales de blockchain, con mayor velocidad y seguridad;
• Necesidad de adaptación por parte de profesionales y órganos reguladores a nuevas tecnologías y modelos de profesión legal.

En definitiva, la propuesta de la diputada Marcela Pagano y la tendencia hacia la digitalización a través de blockchain son señales claras de que el sistema legal argentino se encuentra en un punto de inflexión, en donde convergen la tradición profesional y la innovación tecnológica, configurando un futuro por definirse en cuanto a servicios notariales y seguridad jurídica.